INTERMITENCIAS

Critimbó: Luca Bral / @luca_bral_
Fotografías: Cristian Gonzalez / @cronos.films

Una pieza que interpela directamente a lxs artistas de la escena, que arenga a la risa invocando su poder vital y celebra la cultura del conurbano norte. Así se me fue desenrollando ante los sentidos la obra Intermitencias del grupo Vaquitas Imaginarias integrado por Esteban Bresolin (Pelloni) y Raúl Gómez (Cachete), reconocidos con la Mención Dúo Cómico en el Festival Norestada 2024. 

Para crear Intermitencias, los actores se autodirigieron bajo la super/visión de Luis Gonzalez. Dos personajes para dos sillas que desplegarán todo un multiverso de varios espacios, entre ellos el principal: la sala de espera en una productora que hace audiciones. Cachete y Pelloni tienen pinta de humoristas berretas a los que se les pasó el cuarto de hora, pero los sueños elevados de uno y las ínfulas soberbias del otro no les permiten que se enteren. Ante todo la competencia parece ser el camino más natural bajo las circunstancias que los apremian, la rivalidad que empieza para ganarle el papel al otro se termina extendiendo en toda la trama con resultados desopilantes. 

Si bien quien observa llega a intuir que este dueto de actores se conoce mucho, la dinámica en escena confirma una grata complicidad. Recorren, rematan, improvisan, vuelven al texto, rompen la cuarta pared. Por momentos se dejan entrever Bresolin y Gómez por sobre Pelloni y Cachete, quienes a su vez van narrando la historia en primeras personas y en personajes secundarios. Los personajes se sostienen uno a otro para no caer en el olvido, su pica permanente los hace brillar y el público disfruta. 

Un detalle interesante es la elección de una atmósfera atemporal, porque hace que sea muy sencillo identificarse con realidades actuales: ese loop de fracaso sin posterior sapiencia. Saberse en la misma y no poder ayudarse. La incapacidad para reconocer eso que se tiene, enceguecidxs persiguiendo la falta. 

En Intermitencias vas a ver un homenaje a los cómicos populares, desde los de varieté hasta la carne de casting, pasando por los capocómicos argentinos y clásicos del cine mudo. No por casualidad el escenario que pisaban era el del Martín Fierro, durante toda la obra se vislumbran alusiones a los espacios culturales históricos de la zona norte. Con nostalgia y respeto, pero también como una declaración de resistencia por la identidad y la persistencia de la existencia. 

Cabe destacar que Intermitencias es a primera vista una comedia, el lenguaje que se eligió fue el del humor, un bien fundamental en estos tiempos trágicos y un vehículo de lujo para encriptar mensajes. Más que pases de comedia con doble sentido encontramos de triple sentido, en cada “chiste de tío” el sarcasmo sobrevuela la inocencia. No se sabe hasta dónde llega el borde entre ficción y realidad o entre la realidad ficcionada pendiente del algoritmo que habitamos actualmente. 

Un punto notable es el vestuario de Clara Hecker, su uso de los tonos opuestos cruzados, acentuando el antagonismo y el detalle del talle exagerado en Pelloni, que favoreció mucho al personaje enriqueciéndolo.

¿Por qué se llama Intermitencias? Andá a verla y enterate.

FICHA TÉCNICA

Dramaturgia y Dirección: Esteban Bresolin y Raúl Gómez.

Supervisión: Luis Gonzalez.

Elenco: Raúl Gómez y Esteban Bresolin.

Vestuario: Clara Hecker.

Grupo: @vaquitasimaginarias.

 

Red Timbó

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