Hoy les vengo a presentar una receta fácil, rápida y barata para engañar a nuestros estómagos cuando nos pinta el bajón. Y claro, ¿qué te pensás? ¿Tengo cara de Ricky Fort? Yo no puedo comprarme esos embutidos exóticos, ni menos que menos unas Frenchitas o unos maní salados. Te la hago corta, rey. Acá te voy a mostrar cómo hacer un hummus de arvejas para untar con pancito en esas tardes de sábado o para entrarle antes de la cena como un campeón. Esto es muy sencillo, no hay que hacer casi nada. Atento que dentro de este casi nada hay algunas cositas para tener en cuenta. Anotá.
Para realizar el hummus de arvejas vas a necesitar:
1 lata de arvejas
½ limón
1 diente ajo
2 cucharadas de perejil
3 cucharadas soperas de aceite de oliva
Comino y pimienta a gusto
Sal a gusto
Preparación: En un bowl tiramos todas las arvejas. Luego echamos las 3 cucharadas soperas de aceite de oliva. Si no tenés aceite de oliva, no te preocupes, podés usar el que tengas a mano. Ponemos 1 diente de ajo bien cortadito dentro del bowl. Picamos un poquito de perejil y lo mandamos adentro también. Ya estamos en la mitad de la receta. Eunaboludé, ¿no? Nos queda solamente condimentar nuestro hummus. Yo le pongo un poquito de comino y pimienta. Obviamente que también sal. Vos andá probando con el condimento que se te antoje. ¡Apa! Casi me olvido de algo importantísimo. El limón. Antes de cortarlo, rayamos un poco y lo vertemos en el bowl. Una vez hecho esto, nos queda ponerle el jugo de limón. Acá sí tienen que estar atentos. Solamente el jugo de medio limón. Ahora solo falta mixear esto hasta que quede una pastita. Si querés que te quede más cremoso, le vas echando agua de a poco. Listo, ya está. Solo te queda agarrar un pancito, untarle abundante hummus y colorín colorado esta receta se ha terminado. |
Texto y fotografía: Franco “Pepe” Lopez